SIN SEGURIDAD NO HAY LIBERTAD
Es la frase más clara en la que podemos resumir todo lo que significa tener seguridad personal y de la propiedad.
Nos preguntamos porque de la tardanza de reforzar la vigilancia y los controles de la Guardia Civil. Ya que hasta que no ha existido una presión social y mediatica nuestros representantes no se han puesto manos a la obra.
No entendemos tampoco como un municipio como Épila donde gobierna desde hace muchos años el alcalde socialista Sr. Lallana, no posee con los habitantes que tiene Policía Local. Ya que en poblaciones de este tamaño resulta imprescindible tener Policía del propio Ayuntamiento.
Tampoco podemos entender como la Delegación del Gobierno está actuando tan tardíamente, además de que los recursos presupuestarios que poseen muchos cuarteles de la Guardia Civil son, no solamente escasos, sino precarios y preocupantes.
Reforzar nuestro Código Penal y La ley de Extranjería para casos reiterados de robos y agresiones por parte de los mismos sujetos, así como un refuerzo claro de la seguridad hacia la población de nuestros pueblos, parece el camino más razonable para intertar buscar una solución al problema, que se esta generalizando en muchos pueblos de Aragón.
Lamentablemente si no se da una seguridad a los ciudadanos, serán estos los que tendran que defenderse de los robos y agresiones que sufren en el medio rural y esto tampoco parece una solución para el problema.
Solicitamos a la Delegación del Gobierno en Aragón que pongan todos los medios tanto humanos como logísticos para resolver la seguridad en nuestra Comunidad. Que es el bien más sagrado que puede tener un ciudadano. La seguridad es y será siempre la mayor de las libertades democráticas.
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